Durante los últimos meses la mayoría de las personas han pasado más tiempo en sus hogares debido a la cuarentena por coronavirus. Esto ha traído como consecuencias clases online, trabajo remoto y distintas actividades del día a día a espacios que solían ser sólo para descansar.
Pocas son las personas que cuentan con la implementación adecuada para trabajar desde sus casas, por esto es común oír de afecciones relacionadas al dolor de cuello y hombros producto de la mala postura e intentar adaptarse al mobiliario disponible en el hogar.
Una de las causas más frecuentes se debe a que los músculos trabajan en exceso para intentar recuperar la curva normal de las cervicales, así se provocan las dolorosas contracturas musculares. Estas son muy comunes, sobre todo en personas que trabajan todo el día sentadas frente al computador. Dificultades que se acrecientan si no se tiene sillas, mesas o escritorios adecuados para trabajar, ya que se acentúa la mala postura constante lo que podría ocasionar lesiones o dolores físicos en la zona cervical.
Otra de las causales más habituales es la falta de actividad física, puesto que antes se subían escaleras, se caminaba al metro o al interior de la oficina para compartir con otras personas. Ahora esa actividad está disminuida casi en su totalidad, lo que aumenta la tensión en la zona de cuello y hombros debido a que no se están tomando los descansos necesarios en el horario laboral.
En The Label, queremos ayudarte a pasar los incómodos dolores y brindarte distintas soluciones desde casa para que no dejes de cuidarte.
Caminar es una buena alternativa para dejar las molestias de lado, te recomendamos dar vueltas a la manzana cerca de tu casa (siempre con las medidas de protección adecuadas) o al interior de tu hogar; en la cocina, habitaciones, patio, etc. Esta es una de las mejores maneras de lidiar con el dolor ya que el cuerpo se mantiene en constante movimiento.
Intenta darte pequeños breaks durante el día para estirar tu cuerpo. Puedes realizar ejercicios como inclinar la cabeza hacia ambos lados y repetir diez veces. Otra alternativa es colocar las manos cruzadas por detrás de la cabeza y dejar caer el peso de las manos para estirar tu cuello. Por último, te podría servir poner tu espalda pegada a la silla y en cada respiración flexionar la cabeza hasta la parte media de la zona lumbar y volver lentamente vertebra por vertebra.
Una solución efectiva es intentar utilizar soportes o cojines para la zona lumbar, esto obligará a tu espalda a mantenerse en una buena posición evitando la mala postura, ideal que tus caderas y rodillas estén al mismo nivel para evitar contracturas.
No olvides consultar con un profesional en caso de que el dolor se agrave o permanezca en el tiempo, porqué podría ser una afección más grave. También, te recomendamos asistir a un quiropráctico o fisioterapeuta que te ayudará a descontracturar los músculos de todo tu cuerpo.