‘El Dilema de las Redes Sociales’ : el documental que nos deja expuestos

La producción dirigida por Jeff Orlowski se enfoca en explorar los distintos fenómenos que se dan actualmente en torno a las redes sociales, no solo a nivel personal, sino que también generacional y social, donde los propios creadores de plataformas como Facebook, Google, Instagram y Twitter dejan al descubierto las situaciones a las que nos enfrentamos como usuarios. 

Tanto ha sido el revuelo que ha causado este documental que llegó a posicionarse dentro del top 10 de los contenidos más vistos de la plataforma de streaming ¿Pero, por qué todo el mundo lo está viendo? 

‘The Social Dilemma’ nos muestra desde la mirada más cercana y casi en primera persona, cómo el internet y específicamente las redes sociales nos han convertido en un producto para las grandes empresas de tecnología.  Todo esto, además, narrado por ex trabajadores y mentes creativas de Twitter, Instagram, Facebook, Pinterest y muchos otros.

El personaje principal es Tristan Harris, ex diseñador ético de Google y cofundador del Centro para Tecnología Humana, quien cuenta cómo funciona este modelo que le llena los bolsillos a las plataformas que usamos todos los días. Según señalan, cada uno de nosotros vivimos en una especie de ‘Show de Truman’, donde nuestra actividad en las RRSS es constantemente monitoreada.

Si bien, nada de lo que se muestra parece ser nuevo en una primera impresión, si llega a ser impresionante cómo nos cuentan a modo de confesión, todo lo que hacen las plataformas digitales para obtener información acerca de nosotros, nuestros gustos, con quiénes nos relacionamos, entre muchos otros datos sobre nuestras vidas. 

Si eres de los que aún se sienten escépticos respecto a la poca o casi nula privacidad que nos otorgan las redes sociales, será un documental más que interesante y que logrará hacerte, al menos, sentir un poco incómod@ sobre tu existencia en internet. El dilema sobre los límites éticos de las empresas de Silicon Valley da para una larga discusión.

Pero también hay que recalcar que, a ojos de los que diariamente trabajamos en la industria de la tecnología, no parece nada muy nuevo. Da la sensación de que solo nos vienen a confirmar, de una manera más alarmante y dramática, cómo somos escuchados y cómo vivimos bajo la lupa de los más poderosos del mundo del internet.

De todos modos, es una manera de encontrarnos de frente con algo que veníamos sospechando desde hace mucho cuando en más de una ocasión, recibimos anuncios después de haber conversado sobre algún tema con amigos. 

Pero el hilo conductor de la trama de este documental también profundiza acerca de otros temas importantes en torno al uso de las redes sociales. La adicción que generan, la inseguridad, la obsesión respecto a cómo recibimos la opinión de los demás y muchos otros factores que intervienen, no solo en nuestra calidad de vida, sino que también en nuestra salud mental. 

Incluso se presentan datos duros que reflejan el incremento de adolescentes con depresión y aumento en la tasa de suicidios en este mismo rango de edad desde la era del internet. Y uno de los puntos más importantes es explicarnos por qué, como usuarios no pagamos por el uso de las plataformas. 

La incapacidad emocional y social para manejar las exigencias de las redes sociales que usamos es lo que está en juego a cambio de poder usarlas gratuitamente. 

Sin embargo, no hemos visto grandes cambios en la utilización del internet. ¿Conoces a alguien que haya eliminado sus redes sociales después de ver el documental? Probablemente no. Es muy probable que ya estemos tan acostumbrados a este intercambio de información y datos hacia los grandes del internet, que ya aceptamos como parte de nuestras vidas entregar una porción de ésta a cambio de validación, dopamina instantánea y aprobación en forma de likes. 

Y tú, ¿ya lo viste? Si la respuesta es no, ya sabes que Netflix está dispuesto a darte pruebas para que juzgues y debatas internamente sobre el dilema de tener o no redes sociales.